Cinco técnicas y métodos efectivos para ahorrar dinero

1. Reto de las 52 semanas

Esta es una técnica de ahorro muy popular en Estados Unidos y, aunque su historia es incierta, fue una mujer llamada María Pilar Amela quien la popularizó en su libro “Ahorradoras”. Es un método ideal para quienes nunca han ahorrado antes o les cuesta mucho lograrlo, porque propone un aumento paulatino y creciente que va desde un dólar en adelante. ¡Si este es tu caso, pon especial atención! 

Pasos para cumplir el reto de las 52 semanas

Algo que no vamos a hacer es fijarnos en gastos, ingresos y presupuestos, así que puedes relajarte un poco. Aunque te recomendamos ampliamente que siempre tengas esas tres cifras bien mapeadas. 

1. El año tiene 52 semanas y es el tiempo que ahorrarás. 
2. Puedes empezar en la fecha que quieras, por ejemplo, si inicias en noviembre de este año, tu ahorro termina en noviembre del próximo, hasta que decidas empezar otra vez. 
3. En la semana 1 ahorras un 1 dólar; en la semana 2, ahorras 2 dólares y así sucesivamente hasta llegar a la semana 52.
4. Separa tu ahorro del resto del dinero para que no tengas la tentación de gastarlo. 
5. La idea es que ahorres el mismo monto del número de la semana. Por ejemplo, en la semana 25, ahorrarás 25 dólares y en la semana 52, guardarás 52 dólares. 

Este método para ahorrar dinero también es  muy sencillo y necesitarás poco para ponerlo en práctica. 

La ley de Pareto explica que el 80% de las consecuencias provienen únicamente del 20% de las causas o acciones. Este principio se utiliza en muchos campos, como la ciencia o la economía y, por supuesto, también se ha convertido en una técnica que funciona muy bien a la hora de ahorrar. Cuando veas lo sencillo que es, no dudarás en ponerlo en práctica. 

Cómo ahorrar utilizando la Ley de Pareto

Este método ya te exigirá ahorrar un poquito más que el anterior, pero siempre manejando un mismo porcentaje y, con el tiempo, aprenderás a optimizar el dinero del que dispones. 

1. Identifica bien tus ingresos totales, estos serán el 100% de tu dinero. 
2. Del 100% de tus ingresos, vas a separar 80% para gastos mensuales de todo tipo. 
3. Separa el otro 20% de tus ingresos para ahorrar. ¡Vamos a calcular!

Haz este cálculo con tus ingresos fijos reales.

Una de las causas más frecuentes por las que no se logran las metas financieras es caer ante la tentación de gastar los ahorros. Si ya sabes que tiendes a hacerlo, la opción del ahorro flexible puede ser una de las más eficaces y versátiles que hay y podría sentarte bien a la hora de comenzar este nuevo hábito. 

¿Por qué decimos que es eficaz y versátil?

1. El monto a ahorrar lo eliges tú de acuerdo a tu capacidad económica, así que puedes decidir ahorrar desde $10,00 hasta montos más altos como, por ejemplo, el 20% de tus ingresos. 
2. No tienes que preocuparte por separar el dinero, el débito se hace automáticamente y se traspasa a tu cuenta de ahorro flexible.
3. Puedes ganar un bono si eres disciplinado con tus ahorros. 
4. Eres libre de retirar tu dinero cuando estés listo para ir por ese objetivo. 

Pasos para aplicar la técnica del Ahorro Flexible

1. Define un objetivo por el que ahorrarás. ¿Vacaciones, auto nuevo, estudios? ¡Todo se vale!
2. Determina cuánto estás en capacidad de ahorrar mensualmente sin afectar tu bienestar. 
3. Abre una cuenta de Ahorro Flexible en línea en 10 minutos y ¡listo! El monto que elegiste se debitará automáticamente.

Al inicio de nuestro post, ofrecimos enseñarte formas sencillas de ahorrar. Esta regla no es la excepción y se usa mucho por ser muy fácil pero también te ayuda a organizar mejor tus finanzas. Así que tomaremos en cuenta tres categorías: gastos básicos y obligatorios, ahorro y gastos prescindibles. ¡La categoría de gastos prescindibles va a gustarte! 

Cómo ahorrar utilizando la Regla del 50/20/30

1. Identifica tus ingresos totales, pero enfócate en los fijos, ya que los variables no siempre están disponibles. 
2. Del 100% de tus ingresos, separa el 50% para cubrir gastos básicos y obligatorios, aquellos que te sirven para vivir. Por ejemplo, arriendo, agua, luz, teléfono, transporte, alimentación, vestimenta y gastos escolares si tienes niños. 
3. Del 100% de tus ingresos, separa el 20% para el ahorro. ¿Recuerdas lo que te recomendaba la Ley de Pareto? 
4. Del 100% de tus ingresos, debes tomar el último 30% para gastos prescindibles pero que te pueden ayudar a mejorar tu calidad de vida y la de tu familia. Recuerda que la calidad de vida no es lo mismo que el estilo de vida y, aunque a veces darse un gusto es más que necesario, no significa que el 30% de tu sueldo lo debas destinar a compras innecesarias y costosas.

Te dejamos un ejemplo basado en un sueldo de 1.200,00 para que tú también puedas proyectar tu ahorro con este cálculo.

También llamado Kakeibo, este método para ahorrar dinero viene desde Japón y tiene más de 100 años de historia. Se pronuncia kakiboh y significa “libro de cuentas”, así que eso ya te da una idea de hacia dónde te llevará. Lo inventó Hani Motoko, la primera periodista japonesa, y desde 1904 esta técnica estuvo muy vinculada a las mujeres del hogar, quienes encontraron en ella la libertad para gestionar las finanzas familiares. 

Pasos para aplicar el método Kakebo

¡Es muy sencillo! A continuación vamos a explicarte cómo usarlo correctamente. Lo único que necesitarás de momento es lápiz y papel o cualquier herramienta digital de tu preferencia en la que puedas tomar apuntes. 

1. Identifica todos tus ingresos, estos pueden ser fijos como el sueldo, o variables como trabajos extra que puedas llegar a hacer eventualmente.
2. Haz una lista de tus gastos fijos mensuales, es decir, aquellos que nunca puedes dejar de pagar.
3. Decide cuánto vas a ahorrar. Es mejor si  separas ese monto antes de comenzar a pagar tus cuentas. Así no ahorrarás lo que te sobre sino siempre un monto fijo que te resulte significativo. 
4. Elabora un presupuesto. De los ingresos resta los gastos fijos para identificar cuánto dinero te queda disponible. Separa un monto también para los gastos variables de cada semana. 
5. Anota todos tus gastos semanales para controlar si de verdad estás cumpliendo con lo planteado al inicio y, sobre todo, para saber si estás gastando de más y a qué se debe. 

¿Qué método vas a comenzar a probar?