FacebookXLinkedinWhatsapp
Efecto de exceso de confianza en tus finanzas

Sesgo de exceso de confianza: cómo nubla la percepción que tienes de tus finanzas

Redacción Banco Pichincha

26 de Junio 2024

Educación Financiera

Tiempo de lectura: 5 min

“Desde el próximo mes empezaré a ahorrar”... “Todavía puedo endeudarme un poquito más”... “Siempre tengo la suerte de conseguir un trabajo”... Estas y muchas otras expresiones podrían sonarte familiares y no estamos aquí para juzgarte, porque esa autoconfianza nos gusta. De hecho, queremos que aprendas a usarla a tu favor sin que se convierta en una limitante. ¿Cómo podría ser esto posible? ¡Es hora de hablar del sesgo cognitivo de exceso de confianza!

Exceso de confianza: un velo que te cubre los ojos

Se trata de un pensamiento sesgado que se enfoca en sobrevalorar las propias capacidades para alcanzar metas o tomar decisiones asertivas. Este exceso de optimismo o confianza puede parecerte positivo porque funcionan como un impulso que te motiva a hacer cosas en lugar de quedarte contemplándolas. Además, adquieres mayor confianza en ti mismo y eso puede darte más desenvoltura en ámbitos donde lo requieras, como en el trabajo.

 

Pero, aunque parezca que solo trae ventajas, suele ocasionar estragos, sobre todo en cuestión de finanzas personales y estamos aquí para quitarte ese velo de los ojos.

Señales de que estás bajo el efecto de la sobreconfianza

¡Ni cuenta te das que has caído en el hechizo del exceso de confianza! Tal vez estás bajo este efecto, así que aquí te dejamos cinco señales comunes para que vayas despertando.

  1. Tomas decisiones impulsivas: después de todo, muchas veces lo has hecho así sin percibir consecuencias graves. Entonces compras y gastas a tu apetito con la confianza de gurú.

  2. Te endeudas fácilmente: sobre todo en cosas pasajeras, haciendo mal uso de tu tarjeta de crédito.

  3. Tu economía no crece: hace tiempo que tus finanzas se mantienen en un statu quo, no pasa nada malo, pero tampoco pasa nada bueno, nuevo, que involucre crecimiento.

  4. Sientes que no necesitas aprender: ¿qué tan difícil puede ser usar la tarjeta? ¿Gestionar una deuda? El efecto de sobreconfianza te hace creer que puedes hacerlo bien con el conocimiento que ya tienes (aunque sea poco), por eso no aprendes educación financiera.

  5. Crees que el éxito financiero es fácil: piensas que lo estás haciendo tan bien con tu dinero que pronto llegará la estabilidad económica definitiva o, peor aún, la libertad financiera.

Bonus

El sesgo de exceso de confianza también genera un alto sentido de complacencia, incluso con pequeños logros. Esto puede impedir que te esfuerces más y que tomes las acciones necesarias para lograr un progreso real.

Quítate el velo y ponte los lentes

Dicho lo anterior, es hora de que te pongas los lentes porque vamos a explicarte cuáles son las consecuencias de dejarse llevar por la sobreconfianza cuando se trata de manejar tu dinero:

  1. Gastas más de lo que ganas: tal vez alguna vez gestionaste el sobrendeudamiento con éxito y por eso, crees que siempre será igual, así que gastas más de lo que realmente puedes pagar. 

  2. Crees que no necesitas un presupuesto: ¿para qué tenerlo si antes no lo has tenido? Consideras que no cambiará nada tener un listado funcional de tus gastos. 

  3. No consultas tus estados de cuenta: ignorar esta información solo hace que tus deudas se mantengan en un desorden que usualmente se sale de control. 

  4. Subestimas el estar endeudado: no llevas el control de las cuotas de tus tarjetas de crédito y, por lo tanto, no calculas tu deuda mensual. Así, puedes caer fácilmente en el sobreendeudamiento

  5. Ignoras los consejos financieros: no importa si es ‘palabra santa’, tú has decidido que no necesitas consejos de dinero y, peor aún, no te acercas a lecturas para aprender a manejar mejor tu economía. 

  6. No ahorras: un fondo de emergencia te protege de imprevistos, como una enfermedad o la pérdida del trabajo. Entonces, ante un imprevisto, podrías sufrir un descalabro financiero. 

  7. No inviertes en tu futuro: el exceso de confianza te hace creer que nunca necesitarás un seguro de salud o de vida, por ejemplo. Pero la realidad es que, al no invertir en el futuro, este, tu patrimonio y tu familia están desprotegidos. 

Cómo ser optimista pero no demasiado... al menos en las finanzas

  • Acéptalo: admite que estás tomando decisiones financieras imprudentes, influenciadas por tu exceso de confianza.

  • Mantén un enfoque realista: haz conciencia sobre tus fortalezas financieras y admite tus debilidades. No te engañes pensando que todo será fácil.

  • Planifica tus acciones: dedica tiempo a crear un plan detallado para alcanzar tus metas. Este plan debe incluir pasos concretos, plazos y estrategias para superar los obstáculos.

  • Monitorea tu progreso: haz un seguimiento de cómo avanzas regularmente y ajusta tu plan según sea necesario. Festeja los progresos, pero admite las recaídas.

  • Aprende a manejar tu dinero: todo será más sencillo con un poco más de información. La educación financiera no es difícil y suma demasiado a tu economía. En nuestro blog, Hablemos en confianza, encuentras todos los recursos que necesitas.

Recuerda, el optimismo y la confianza en uno mismo es importante, pero no debes ser ciego. Un optimismo más realista, combinado con planificación, esfuerzo y conocimiento, te ayudará a alcanzar tus metas.